El Arte de la Excepcionalidad
Dom Pérignon no es simplemente un champagne; es una declaración de intenciones, una búsqueda incesante de la perfección. Cada añada es una interpretación única del año, y la cosecha de 2013 se presenta como una expresión de equilibrio y precisión.
El Legado de Dom Pérignon
Nombrado en honor al monje benedictino Pierre Pérignon, quien desempeñó un papel crucial en la mejora de la calidad del vino en la región de Champagne, Dom Pérignon ha sido sinónimo de lujo y excelencia desde su primera cosecha en 1921. La marca, propiedad de Moët & Chandon y parte del conglomerado LVMH, se distingue por producir únicamente champagnes de añada, elaborados exclusivamente en años excepcionales.
Condiciones Climáticas de 2013: Un Año Singular
El año vitícola 2013 fue una reconexión con las cosechas tardías del pasado. Tras un invierno frío y húmedo, y una primavera fresca y lluviosa, el verano cálido y seco resultó especialmente beneficioso para la calidad de la uva. La vendimia en Dom Pérignon comenzó el 28 de septiembre, revelando un equilibrio prometedor entre acidez y cuerpo.
Composición y Vinificación
La añada 2013 es una mezcla de 51% Chardonnay y 49% Pinot Noir. El vino fue degollado en octubre de 2021, con una dosificación de 5 g/L. Esta combinación ofrece una estructura equilibrada y una expresión clara del terruño.
Análisis Sensorial: Nariz y Paladar
Nariz: El bouquet se despliega en capas de color: notas verdes de eucalipto, menta y vetiver; tonos amarillo-naranja de mirabel, albaricoque y flor de azahar; matices marrones de pimienta, cardamomo y regaliz; y finalmente, tonos plateados de salinidad y notas tostadas.
Paladar: La sensación en boca es elegante y refinada, con una textura sedosa y una simplicidad lujosa. El final está dominado por una profunda salinidad, dejando una impresión duradera.
Comparativa con Añadas Anteriores
La añada 2013 se sitúa entre la frutal 2012 y la mineral 2008, ofreciendo una expresión fresca y precisa. Es más austera que otras añadas recientes, pero posee una longevidad notable.
Maridajes y Momentos de Consumo
Dom Pérignon Vintage 2013 es versátil en maridajes, acompañando desde mariscos y pescados blancos hasta platos más complejos como aves de corral con salsas cremosas. Su equilibrio y frescura lo hacen ideal para celebraciones especiales o momentos de contemplación.
Presentación y Estética
La botella de Dom Pérignon es reconocible al instante, con su distintiva etiqueta en forma de escudo. La añada 2013 mantiene esta tradición, presentándose en un estuche elegante que refleja la sofisticación del contenido
Opiniones de Expertos
La crítica especializada ha elogiado la añada 2013 por su claridad y precisión. Se destaca su equilibrio entre acidez y cuerpo, así como su capacidad de envejecimiento. Es considerada una de las añadas más elegantes y sutiles de la casa en los últimos años.
Una Añada para la Eternidad
Dom Pérignon Vintage 2013 es una expresión de la dedicación a la excelencia y la interpretación del tiempo y el terruño. Es un champagne que invita a ser descubierto y redescubierto, ofreciendo una experiencia sensorial que perdurará en la memoria.