Los orígenes de un templo gastronómico
Para empezar, hay que remontarse a 1970, cuando abrió sus puertas el restaurante Akelarre en el monte Igeldo, San Sebastián. Sin embargo, fue en 1975 cuando Pedro Subijana tomó las riendas del proyecto, marcando un antes y un después en la historia de la alta cocina vasca. Desde entonces, el restaurante ha ido sumando reconocimientos hasta alcanzar, en 2007, la anhelada tercera estrella Michelin.
La evolución hacia la excelencia
Con el paso de los años, Akelarre no solo se ha mantenido en la cima, sino que ha logrado reinventarse constantemente. Primero llegaron los menús degustación visionarios; después, en 2017, la apertura del hotel de lujo con 22 habitaciones frente al mar. De esta manera, la propuesta gastronómica se transformó en una experiencia integral de hospitalidad que fusiona vistas, arquitectura y creatividad culinaria.
El menú conmemorativo del 50 aniversario
Más recientemente, en 2025, Subijana celebró sus cinco décadas al frente de la cocina con el menú especial Urteurrena. Este recorrido combina platos icónicos reinterpretados con nuevas creaciones que anticipan el futuro de Akelarre. Así, conviven elaboraciones como la célebre lubina a la pimienta verde con innovaciones sorprendentes como la flor de alcachofa con sopa de acelga y foie, que ya ha conquistado a estrellas del Festival de Cine de San Sebastián.
Innovación con raíces
No obstante, a pesar de su afán innovador, Akelarre mantiene una conexión profunda con los productos locales y la tradición vasca. Ingredientes de temporada, técnicas cuidadas y respeto por el producto definen la filosofía de Subijana, quien siempre ha defendido que la vanguardia debe estar anclada en la identidad del territorio.

Espazio Oteiza: otra puerta al lujo gastronómico
Por otro lado, el complejo cuenta también con Espazio Oteiza, un espacio gastronómico más relajado que ofrece terraza, barra y coctelería. De este modo, quienes buscan una experiencia más accesible pueden disfrutar de la calidad Akelarre sin necesidad de optar por el menú degustación completo.
Compromiso con el medio ambiente
Además, Akelarre ha dado un paso más allá al convertirse en el primer hotel en España con el sello EU Ecolabel, reconocimiento europeo a la sostenibilidad. Esto demuestra que el proyecto no se limita a la excelencia culinaria, sino que también apuesta por la responsabilidad medioambiental y social.
Críticas, elogios y retos futuros
En general, la crítica internacional y los clientes valoran el restaurante con notas sobresalientes, destacando el servicio impecable y la creatividad de los platos. Sin embargo, también existen comentarios que señalan el alto precio o comparaciones con otros restaurantes de tres estrellas. Aun así, Akelarre sigue siendo un símbolo de prestigio global y un referente indiscutible en la gastronomía vasca.
En definitiva, Akelarre no es solo un restaurante; es una institución que ha sabido evolucionar con los tiempos sin renunciar a sus raíces. Gracias a la visión de Pedro Subijana, el proyecto combina tradición, innovación y sostenibilidad. Así, medio siglo después, continúa demostrando que la verdadera excelencia se construye con paciencia, talento y pasión.
								