En un universo donde la moda y la autenticidad convergen, Bella Hadid emerge nuevamente como una de las figuras más influyentes del panorama del lujo. Tras un periodo de pausa marcado por su lucha contra la enfermedad de Lyme, la supermodelo ha regresado con un enfoque renovado, proyectos personales ambiciosos y una elegancia que redefine el glamour contemporáneo.
Un regreso estratégico a las pasarelas
Después de dos años de silencio profesional, Bella reapareció en el desfile de Saint Laurent Primavera/Verano 2025, cerrando la pasarela con un vestido de encaje negro que acaparó todas las miradas. Este regreso no fue casual: simboliza una nueva etapa donde la modelo busca calidad antes que cantidad.
Además, su presencia en París no solo confirmó su poder icónico, sino también su control total sobre su narrativa: ya no se trata de la joven promesa del modelaje, sino de una mujer que dicta su propio ritmo.
Orebella: su apuesta por el lujo consciente
A la par de su regreso a las pasarelas, Bella presentó Orebella, su línea de fragancias basada en aceites esenciales y formulaciones naturales. Este proyecto representa más que un simple negocio: es una extensión de su identidad.
Con Orebella, Hadid se adentra en el mundo del lujo sostenible, un concepto que equilibra sofisticación, bienestar y respeto por el entorno.
Asimismo, las fragancias —envueltas en un diseño etéreo de vidrio y tonos perlados— evocan el espíritu libre y elegante que caracteriza su nueva etapa personal.
Colaboraciones exclusivas y estilo en expansión
Por otro lado, su alianza con Frankies Bikinis ha captado la atención del público y de la crítica. La colección cápsula, inspirada en la estética cowgirl-chic, fusiona el espíritu del rodeo texano con la sensualidad moderna.
A través de esta colaboración, Bella reivindica su conexión con la naturaleza, los caballos y la vida fuera de las grandes capitales.
Además, su participación en campañas de Coach y Saint Laurent Beauty confirma su capacidad de adaptación entre lo urbano, lo artístico y lo atemporal.
Entre la elegancia y la autenticidad
Sin embargo, lo que distingue verdaderamente a Bella Hadid en esta nueva fase es su vulnerabilidad pública. Ha compartido con sus seguidores momentos de introspección y superación, mostrando que la belleza también reside en la honestidad.
Esta combinación —autenticidad emocional y estética impecable— la convierte en una embajadora del lujo con alma: una figura capaz de inspirar tanto a las marcas como al público.
Mirando hacia el futuro
En los próximos meses, Bella continuará expandiendo Orebella con nuevos lanzamientos, mientras mantiene colaboraciones con casas de moda de alto perfil.
