Un refugio provenzal con alma cinematográfica
El magnetismo de George Clooney no solo reside en la gran pantalla. También se extiende a su nueva vida en la Provenza, donde el actor ha encontrado su refugio ideal: una finca del siglo XVIII en Brignoles, corazón del departamento de Var. Rodeado de viñedos, olivos y campos de lavanda, el actor ha transformado el antiguo Domaine du Canadel en su paraíso personal.
La propiedad, de 172 hectáreas, combina el encanto histórico con la sofisticación contemporánea. Su casa principal, de piedra dorada y tejado de tejas antiguas, mantiene la autenticidad provenzal, mientras que las reformas introducen el confort de una villa de lujo moderna: piscina infinita, pista de tenis, lago privado y jardines diseñados para disfrutar de la calma absoluta.
La decisión de cambiar Hollywood por la vida rural
En una reciente entrevista, Clooney confesó que su motivación fue puramente familiar: “Me preocupaba criar a nuestros hijos en la cultura de Hollywood”. Junto a su esposa Amal y sus mellizos, el actor buscó un entorno donde el tiempo discurra más despacio, donde los días se midan por la luz del sol y no por la agenda de rodajes.
“Vivimos en una granja en Francia, sin pantallas durante las comidas. Ellos ayudan, recogen sus platos y disfrutan de una vida normal”, declaró. Un gesto que muchos interpretan como una declaración de principios: el lujo verdadero es la simplicidad elegida.
Un estilo de vida entre el vino, el arte y la discreción
Lejos del bullicio de Los Ángeles, Clooney se ha integrado en la vida local. Es frecuente verlo en bicicleta por los caminos rurales o conduciendo su tractor, en un paisaje que combina tradición y exclusividad. La finca produce su propio aceite de oliva y vino, siguiendo la tendencia de las estates sostenibles tan valoradas en el mundo del lujo contemporáneo.
Su vecindario no es menos glamuroso: a pocos kilómetros se encuentran las propiedades de Brad Pitt y Angelina Jolie en Miraval o la de John Malkovich en Vaucluse. Sin embargo, Clooney prefiere el anonimato de Brignoles, una zona donde los lugareños lo tratan “como a uno más”.
La Provenza: donde la elegancia se mezcla con la autenticidad
El paisaje provenzal —suave, perfumado, bañado por el mistral— ofrece el escenario perfecto para la reinvención del actor. Allí, entre olivos centenarios y viñedos ondulantes, Clooney ha encontrado un ritmo de vida más humano. “Ahora conduzco un tractor y vivo una rutina sencilla”, confesó.
En tiempos donde la fama se mide en flashes y seguidores, Clooney representa una nueva forma de lujo: la intimidad, el silencio y la conexión con la tierra.
Un retiro con mensaje
Más que una casa, su finca en la Provenza simboliza un cambio de paradigma. El actor que un día encarnó el glamour de Hollywood hoy se convierte en embajador de un nuevo lujo: el de vivir sin prisa, sin ruido y sin necesidad de demostrar nada.
 
								