Un retiro sofisticado lejos de los focos
Lejos del ritmo frenético de Hollywood y de las alfombras rojas, Blake Lively ha encontrado en el campo de Nueva York el equilibrio perfecto entre elegancia, privacidad y vida familiar. Junto a Ryan Reynolds, la actriz ha convertido su casa de campo en un auténtico santuario donde el lujo se expresa de forma serena, sin excesos ni ostentación innecesaria.
Pound Ridge, el enclave elegido
La propiedad se encuentra en Pound Ridge, una exclusiva localidad al norte del estado de Nueva York conocida por sus extensas zonas verdes, su baja densidad urbana y su atmósfera sofisticada. Rodeada de más de cuatro hectáreas de terreno arbolado, la finca ofrece una privacidad absoluta, una cualidad especialmente valorada por una de las parejas más reconocidas de la industria cinematográfica.
Arquitectura clásica con alma contemporánea
La vivienda principal responde a un estilo colonial americano que dialoga de manera natural con el entorno. Fachadas equilibradas, tejados a dos aguas y grandes ventanales definen una arquitectura atemporal que huye de las modas pasajeras. En su interior, los espacios son amplios y luminosos, pensados para una vida familiar cómoda pero refinada.
La casa cuenta con varias suites, salones generosos y zonas comunes diseñadas tanto para el descanso como para la convivencia. A ello se suman edificaciones auxiliares, como una casa de invitados y antiguos graneros reconvertidos, que refuerzan el carácter señorial de la propiedad.
Interiores que priorizan la calidez
Aunque los detalles exactos se mantienen con discreción, todo apunta a que el interior refleja el gusto personal de Blake Lively por los ambientes acogedores. Maderas nobles, textiles naturales y una paleta de colores suaves crean una atmósfera envolvente que combina elegancia clásica y confort contemporáneo. Cada estancia parece pensada para disfrutarse sin prisa, en sintonía con el paisaje exterior.
Naturaleza, privacidad y vida familiar
Uno de los grandes valores de esta casa de campo es su entorno. Los jardines, las zonas boscosas y los espacios abiertos ofrecen un escenario ideal para una vida tranquila, lejos del escrutinio mediático. Aquí, la pareja ha construido un hogar donde la naturaleza forma parte del día a día y donde sus hijos pueden crecer con una sensación de normalidad poco habitual en el universo de las celebridades.
Un nuevo concepto de lujo
Finalmente, la casa de campo de Blake Lively representa una visión del lujo basada en la discreción, el bienestar y la autenticidad. No se trata solo de una propiedad exclusiva, sino de un estilo de vida que prioriza la calma, la intimidad y la conexión con lo esencial. Un refugio que demuestra que, incluso en la élite de Hollywood, el verdadero lujo puede encontrarse en el silencio, el espacio y el tiempo compartido.