Un legado familiar de cuatro generaciones sacado a la luz
En la capital alemana, la Alte Nationalgalerie de Berlín acoge por primera vez al público una enorme colección privada que abarca cuatro generaciones de coleccionismo, bajo el nombre de Scharf Collection. Con cerca de 150 obras seleccionadas, esta muestra presenta un recorrido desde el siglo XIX hasta la contemporaneidad, con un fuerte foco en maestros franceses del siglo XIX y comienzos del XX, y un puente hacia el arte más reciente.
El origen de la colección se remonta al industrial berlinés Otto Gerstenberg, quien fundó un fondo de arte que su descendencia ha ido enriqueciéndolo hasta hoy. Su bisnieto, René Scharf, junto a su esposa Christiane, ha sido el responsable de preparar esta exposición pública como paso hacia la apertura de piezas que hasta ahora habían permanecido mayoritariamente ocultas o cedidas individualmente.
Obras clave y artistas protagonistas
Entre los nombres destacados figuran Édouard Manet, Paul Cézanne, Henri Matisse, Auguste Renoir, Pablo Picasso y Henri de Toulouse‑Lautrec. Por ejemplo, pueden contemplarse obras como “Waterloo Bridge” de Monet o “The Large Bathtub” de Bonnard, sumando una riqueza artística que abarca impresionismo, posimpresionismo, modernismo y más.
La exposición también incorpora piezas más recientes del ámbito del arte contemporáneo, como trabajos de Katharina Grosse y Anselm Reyle, lo que permite trazar una línea narrativa entre el arte decimonónico y las experimentaciones del presente.
Importancia cultural y accesibilidad pública
Este evento representa un momento significativo: una colección privada que durante décadas permaneció mayoritariamente en reserva se abre a un público amplio, con fines de difusión cultural. René Scharf declaró que parte de la motivación es “compartir lo que antes estaba oculto” y permitir que el público acceda a obras que, de otro modo, difícilmente se verían en conjunto.
El hecho de que la muestra incluya tanto lo clásico como lo contemporáneo ofrece una ventana al desarrollo de la historia del arte moderno y posmoderno, y facilita a los visitantes apreciar conexiones de estilo, técnica, filosofía y contexto entre generaciones de artistas. Además, el escenario berlinés —una ciudad que mezcla historia, cultura y transformación— refuerza la experiencia de contemplar este legado.
Fechas y futuro itinerario
La exposición permanecerá abierta en la Alte Nationalgalerie hasta el 15 de febrero de 2026. Después, viajará a la Kunstpalast de Düsseldorf a partir de marzo del mismo año. Este carácter itinerante permite que más públicos en Alemania tengan acceso a la colección, ampliando su alcance y su impacto.
Ver en un mismo espacio obras de Monet, Matisse, Picasso y artistas contemporáneos es una experiencia enriquecedora para cualquiera que se interese por el arte en profundidad.
